Mole de granito y espina dorsal de España, este espacio natural se ha erigido, desde el punto de vista biológico, como el más valioso rincón serrano de todo el Sistema Central.
Con el Pico Almanzor convertido en el techo de toda Castilla y León, la Sierra de Gredos se encuentra situada en la denominada zona intermedia del Sistema Central, con orientación aproximada este-oeste, entre la sierra de Guadarrama y las sierras de Gata y Peña de Francia.
Geográficamente, Gredos se extiende a lo largo de más de 140 kilómetros en un espacio comprendido entre el Cerro de Guisando (al este) y el Corredor de Béjar (al oeste).
La mayor parte de su superficie -3500 kilómetros cuadrados- pertenece a la provincia de Ávila, y sólo una pequeña parte del macizo occidental forma parte de las provincias de Salamanca y Cáceres.
Configurada básicamente por granitos, su origen geológico se remonta 350 millones de años, época correspondiente a la orogenia herciana. Sin embargo, la Sierra de Gredos todavía conserva claras muestras del glaciarismo posterior experimentado hace 100.000 años en diversas gargantas y, sobre todo, en sus circos, donde se alojan numerosas lagunas permanentemente abastecidas por el deshielo. Enclave de extraordinaria riqueza faunística y botánica, está incluido dentro de la Red de Espacios Naturales de Castilla y León como parque regional de próxima declaración.